Fonda de Ponga

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Lugar: Ponga - Tipo: Comida tradicional

Carretera General
San Juan de Beleño – Ponga (Asturias)
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Teléfono: 985843004


Establecimiento especializado en la cocina de fogón tradicional. Donde se reseñan la fabada con venado, cocido de castañas, la «olla quitafames», la sartén de los pastores o cualquier otro plato de caza.
En postres imprescindibles la tarta de Beleño, el arroz dulce con mermelada.
Dispone de menú del día.

2 Opiniones

  1. Carolina dice:

    Estuvimos dos personas en la Fonda de Ponga el sábado día 3 de noviembre. Estábamos sólos y a las 21 horas de un sábado de puente. En el parabrisas del coche nos habían dejado una publicidad que parecía recomendar el sitio, pero aun así pregunté a media tarde si se podía cenar, y me dijeron que sin problemas hasta las 11.El señor que atendía ofreció un menú de 10€ y la carta. Le preguntamos amablemente si disponía de carne para pedir dos entrecots, ya que teníamos ganas de probar la carne de la zona, advirtiéndole de que si no tenía no pasaba nada y pediríamos otra cosa. El precio era de 15,00€ cada entrecot. Nos dijo que sin problemas, que tenían. Pedimos la carne muy poco hecha. Al rato escuchamos golpes en la cocina, como de algo contra la encimera y nos reimos diciendo «espero que no sean nuestros entrecots congelados». Después de mucho tiempo, y ya digo que estábamos solos nos traen los entrecots con un aspecto que daba asco verlos, con los bordes de la carne de ese color grisáceo que coge la cuando la descongelas a toda prisa en el microondas. Partimos un poco con el cuchillo y sí, estaban poco hechos, cocidos del microondas por los bordes y medio congelados por dentro. Amablemente le decimos a este señor que la carne está congelada y contesta que sí que un poco que se la puede llevar a la cocina y pasarla un poco más. Mi marido accede porque tenía mucha hambre y la alternativa era bronca y no cenar. Yo le digo al señor que no, que no me va a gustar y que no lo quiero. Mi plato no se lo lleva.Trae la carne de mi marido de nuevo y él hace de tripas corazón y se la come, pensando que al menos como estaba congelada no tendría bacterias. Yo no ceno, ni siquiera me como las patatas y la ensalada que acompaña al plato. El señor, que resultó ser el dueño del local, observó como yo me quedaba sin cenar y se llevó el plato entero, con los cortes iniciales y faltando solo el único pedacito que probé. Esa noche cené una cerveza, ya que no pedí postre. Nos cobró los dos entrecots y nos clavó por el pan, la bebida y un yogur que pidió mi marido, pensando que al menos eso no estaría malo. Pensé en reclamar, pero sería mi palabra contra la suya y una noche desagradable podría estropearme la vacaciones.
    Preferimos pagar y olvidarnos, ya que el resto de experiencias que tuvimos con la Hostelería y Servicios de la zona fueron estupendos. Si recalais por la zona puedo recomendar muy cerca Las Mestas, siguiendo la carretera y Casa Severa en Sobrefoz. En esos comí de maravilla. Si yo tuviera un restaurante a mí no se me iba una persona pagando y sin cenar por culpa de mi mal hacer. Nada recomendable

  2. Cesc dice:

    Excepcional menú, por la cantidad y la calidad: tres platos y postres. Comimos dos personas. De primeros dos trocitos de pastel de cabracho y salmón (muy buen sabor) y una ensalada (tierna, sabrosa). De segundos: fabada (excepcional, melosa, muy buen sabor, servida en generosas cazuelitas). De terceros un excepcional cabrito, tiernísimo y unos escalopines al queso beyu realmente muy buenos. Vino tinto Riosella correcto. Macedonia correcta y un sabroso pastel de queso. Nos encantó todo, realmente y las cantidades son más que abundantes. El comedor interior donde comimos también nos gustó (decoración de auténtica fonda con años de servicio). Y todo en el entorno excepcional de San Juan de Beleño. El servicio hipereficiente y aquí está el único “pero”: excesivamente serio. Tanto el padre como los hijos que le ayudan trabajan realmente bien pero al menos con nosotros ni una sola sonrisa. Nos sorprendió (y un poco nos agobió) la seriedad extrema con la que trabajan. Aunque quizás ese día pasaba algo que ignoramos. Por lo demás, un sitio sencillo de aspecto pero con un muy buen nivel gastronómico. Recomendable.

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